Memoria Activa en la Plaza Lavalle frente a Tribunales - Buenos Aires
Diana Malamud
Vísperas del 10º Aniversario del atentado a la AMIA - 17 de Julio de 2004
Hoy, 17 de Julio del año 2004, a 10 años de la masacre en la AMIA, estamos nuevamente aquí. Han pasado 520 semanas del asesinato, 3650 días del crimen, y MEMORIA ACTIVA dice presente.
Como en cada aniversario, nos juntamos y recordamos a nuestra gente, a nuestros hijos que ya no veremos, a nuestros padres que ya no están, a nuestros maridos y esposas que nos arrancaron, a nuestros abuelos y abuelas que ya no nos acompañan, a nuestros hermanos, a nuestros amigos muertos. Los recordamos entre todos, igual que cada día cada uno de nosotros los pensamos en soledad.
Pasaron diez años y es tan difícil hacer una retrospectiva de lo que nos ha sucedido desde entonces, a nosotros como personas y a nosotros como país.
A todos nosotros nos cuesta reconocernos en aquellos que fuimos hace diez años, el 18 de julio de 1994 a la mañana, cuando salimos corriendo hacia la AMIA en busca de un milagro.
Hasta las 9.52 de aquel 18 de julio ellos estaban vivos. Un minuto después los asesinaron, y a nosotros nos arrancaron un pedazo de vida. Tuvimos que salir a la calle a exigir justicia para nuestros muertos. Tuvimos que aprender, sin escuela y sin deseo, a lidiar con el enemigo. Entendimos que tal como lo hicieron las Madres, las Abuelas y tantos otros, debíamos unirnos para enfrentar la impunidad.
10, 10 años en los que transitamos desde la incredulidad a la esperanza, que lamentablemente duró muy poco. Enseguida nos dimos cuenta de que quedamos desamparados ante la complicidad del Estado argentino que hizo lo imposible por encubrir este crimen.
10, 10 años en los que quedamos desamparados por los dirigentes de la Comunidad Judía que, lejos de representarnos, lucraron con la vida de nuestros muertos y aún hoy nos siguen avergonzando.
10, 10 años en los que quedamos inmersos en la más absoluta impunidad. La impunidad no es una definición abstracta, está construida por personas, por aquellas personas con poder que llevan adelante un ejercicio ilegal de sus funciones.
10, 10 años denunciando las tramas de esta constante en nuestro país que es la impunidad.
10, 10 años de muertes que se sumaron a otras muertes en las calles, los puentes, las plazas de nuestro país, todas ellas resumidas en la mirada penetrante de José Luis Cabezas.
10, 10 años señalando a los cómplices con nombre y apellido.
10, 10 años denunciando al ex juez de la causa Juan José Galeano, responsable de que nuestros muertos no tengan justicia. Este juez no sólo fue separado de la causa AMIA a instancias de MEMORIA ACTIVA, sino que hoy está siendo sometido a juicio político.
10, 10 años denunciando a los fiscales Mullen y Barbaccia por cómplices del desastre de la instrucción, no sólo demostraron no estar a la altura de la función que debían cumplir, sino que además, trabajaron codo a codo con el Juez amparando el encubrimiento y las mentiras. Hoy José Barbaccia es candidato a Juez Federal y aún su candidatura increíblemente no ha sido impugnada por la Justicia. No nos sorprendería que siga el camino del ex fiscal Eamon Mullen y renuncie para escapar de un Jury de enjuiciamiento. Es claro que por algo le temen a la justicia. Exigimos que rindan cuentas ante la justicia.
10, 10 años en los que denunciamos a la SIDE de Hugo Anzorregui, que ocultó información previa y posterior, artífice y responsable del encubrimiento. Exigimos que rinda cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos a la Policía Federal y a la maldita Policía de la Provincia de Buenos Aires, que no protegieron, no investigaron, destruyeron pruebas, sembraron pistas falsas, mintieron y callaron. Que nos mostraron de manera emblemática en la figura de Ribelli y sus secuaces una de las peores caras de la corrupción argentina. Exigimos que rindan cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos a la División de investigación antiterrorista DUIA creada por Menem, que trabajó desde el inicio de la causa con Galeano para construir la historia oficial. Esa unidad estaba dirigida por el comisario Palacios, hoy destituido. Exigimos que rinda cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos a Carlos Soria, ex jefe de la SIDE, ex presidente de la Comisión Bicameral de seguimiento a la investigación de los atentados a la Embajada de Israel y la AMIA. Quien avaló todo el accionar del juzgado, cajoneando toda la información y las denuncias que podrían haber esclarecido algo de estos crímenes. Exigimos que rinda cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos a los dirigentes de la DAIA: Beraja, Hercman, Kirschenbaum y Tóker por construir y avalar las mentiras de la causa AMIA. Acérrimos defensores de Galeano y los fiscales, de Palacios y de Menem. Dirigentes que se dicen representantes políticos de la comunidad judía, sin embargo los judíos no los votamos. Dirigentes que se dicen representantes y que no pueden mostrarse frente a la comunidad judía por temor a que los abucheen. A quién representan los que necesitan sostener a una abogada como la Dra. Marta Nercellas quien debiera ser juzgada por las irregularidades que cometió durante la instrucción.
A quién representan los únicos que defendieron el secreto de Estado oponiéndose a la apertura de los archivos de las fuerzas de seguridad, los únicos que se opusieron a que declaren los agentes de la SIDE, para que nunca se sepa la verdad. Los mismos que acusaron a MEMORIA ACTIVA de “traidora a la patria” por denunciar la complicidad del Estado Argentino llevando la causa ante la Comisión Internacional de Derechos Humanos de la OEA. Exigimos que rindan cuentas.
10, 10 años en los que denunciamos a Carlos Corach por cómplice del encubrimiento y la impunidad. Exigimos que rinda cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos a Carlos Ruckauf, Ministro del Interior en el momento del atentado, quien consintió la impunidad, el encubrimiento y las complicidades de todas las fuerzas de seguridad a su cargo. Responsable directo, por acción u omisión, de que el atentado tuviera lugar. Ese señor con las manos manchadas de sangre hoy ocupa una banca en la Cámara de Diputados de la Nación. Exigimos que rinda cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos a los miembros menemistas de la Corte Suprema de Justicia por gravísimas irregularidades en la “no causa” del atentado a la Embajada de Israel, posibilitando en gran medida el segundo atentado. Hoy se fueron casi todos, renunciados o expulsados, acusados por los delitos cometidos. Exigimos que rinda cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos al ex Presidente Fernando De la Rúa, quien en su corta y vergonzosa gestión fue continuador de la construcción de la impunidad; y a sus ministros Storani y Gil Lavedra que amenazaron a miembros de Memoria Activa. Exigimos que rindan cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos al ex Presidente Eduardo Duhalde, responsable de la maldita policía, continuador de la impunidad, quien hoy se autodetermina (sin el apoyo del voto popular) articulador central de nuestro destino. Exigimos que rinda cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que denunciamos al prófugo de la Justicia Argentina, el ex Presidente Carlos Menem, responsable de consentir la impunidad, la impericia y la ineptitud en la causa AMIA. Máximo responsable de que se haya perdido la posibilidad de conocer la verdad y que se haga justicia. Posible responsable de acuerdos y pactos que permitieron que el atentado tuviera lugar y quedara impune. Exigimos que rinda cuentas ante la Justicia.
10, 10 años en los que hemos dicho que es responsabilidad del Estado nacional proteger a sus ciudadanos y que se haga justicia.
El gobierno de Menem ignoró los avisos, no previno, permitió y no le importó el asesinato de 85 personas. Ese mismo gobierno y los sucesivos de De la Rúa y Duhalde hicieron todo lo posible para que nunca se llegara a la verdad.
En función de su propia ineptitud y desidia, en función de sus negociados y sus compromisos políticos, hicieron la investigación más vergonzosa e impune posible. Con tal fin le pagaron 400.000 dólares al último poseedor del motor que explotó en la AMIA, Carlos Telleldín. Con la participación de Galeano, de la Sala Patria de la SIDE de Anzorregui, con el conocimiento de los fiscales, con el abierto apoyo del ex presidente de la DAIA Rubén Beraja y el entonces abogado de la AMIA Luis Dobnievsky, se ocuparon de inventar una historia oficial “abrochada con moño” para callarnos y dar un cierre definitivo al crimen de la AMIA.
Pagarle a un imputado es un delito y nada, NADA justifica este delito.
Nosotros no aceptaremos para cerrar la masacre de la AMIA culpables por culpables, queremos la verdad y la justicia.
10, 10 años realizando el necesario ejercicio de la memoria activa, para que el tema AMIA no muera, para que la causa AMIA no se cierre.
Seguramente muchas de nuestras denuncias no tendrán consecuencias reales, sin embargo debemos seguir haciéndolas.
Es por eso que después de 10 años les seguimos contando a los jóvenes qué pasó en la causa AMIA, es por eso que después de 10 años les seguimos contando a los padres para que le cuenten a sus hijos que pasó en la causa AMIA, es por eso que después de 10 años les seguimos contando a los abuelos para que les cuenten a sus nietos que pasó en la causa AMIA. Es por eso que después de 10 años les seguimos contando a los maestros para que les cuenten a sus alumnos que pasó en la causa AMIA.
Por que en esta construcción conjunta de la memoria colectiva consolidaremos una red que continuará la lucha contra la impunidad.
Después de estos 10 años se puede decir que hay logros??
La respuesta es: NO!!!
Pero, sin embargo, algunos hechos son contundentes:
10 años y se descubrió el encubrimiento y la mentira.
10 años y Galeano, Mullen, y Barbaccia no están más en la Causa AMIA.
10 años y es pública la historia de Beraja.
10 años y algunos de los habitantes de este edificio de la Suprema son otros.
10 años y todos, todos saben quien es, qué hizo y que no hizo el prófugo de la justicia MENEM.
10 años después queda a la Comunidad Judía limpiar sus Instituciones de aquellos que aún están, que no nos representan y que nos avergüenzan.
10 años después queda al Estado mucha tarea por realizar.
10 años después no sabemos cuál será el veredicto de los jueces en este juicio oral, pero sí sabemos que este juicio, que pese a nuestro pedidos y protestas se ocultó a la gente al no permitir su televización, ha dejado muchas enseñanzas de lo que se debe y de lo que no se debe hacer.
10 años después seguimos indefensos frente a un tercer atentado, la mayoría de los horrores que sufrimos pueden repetirse.
10 años después es hora de tener fronteras seguras.
10 años después es hora de que aprendamos del horror, es hora de que cuidemos a nuestros hijos.
10 años después es necesario que el Estado y la Justicia se hagan cargo.
10 años después el Juez Canicoba Corral debe hacerse cargo, tiene la responsabilidad de dar respuestas, seguimos exigiendo que todos los culpables: autores intelectuales, ejecutores, cómplices y encubridores sean juzgados y condenados.
10 años después tienen ahora, Gobierno y Justicia, la ardua tarea de castigar cada uno de los delitos cometidos por los artífices necesarios del encubrimiento durante estos diez años.
10 años después deben juzgarse a los responsables del manejo fraudulento de millones de dólares en nombre de la causa AMIA.
10 años después deben encontrarse y abrirse los archivos faltantes del Estado, donde están los archivos del POC, de la Federal y de la Sala Patria, exigimos su aparición y apertura.
10 años después el Estado tiene pendiente llegar a la verdad.
10 años después el Estado debe hacerse cargo de la seguridad de los ciudadanos, y esto se vislumbrará, entre otras cosas, el día que saquen los barriles de cemento de las cárceles judías donde los terroristas y los sucesivos gobiernos nos fueron encerrando. Es mentira que los pilotes de cemento son sinónimos de seguridad.
Nada va a paliar el dolor que hemos sufrido durante estos diez años por la pérdida de nuestros familiares. Durante estos diez años hemos revivido una y otra vez aquel lunes por la mañana, cuando a las 9 y 53 la bomba voló en pedazos el edificio de la AMIA. Cuando la bomba hizo volar en pedazos a nuestros seres queridos, cuando la bomba voló en pedazos sus futuros y los sueños compartidos.
Han pasado diez años. Diez años que nos enseñaron lo peor y lo mejor de la vida.
Diez años que nos mostraron como un atentado antijudío le importa a pocos.
Diez años que nos enfrentaron casi en soledad a una lucha desigual contra el poder, el poder del Estado, el poder de las organizaciones de la comunidad, el poder de los poderosos.
Diez años de encuentros, de conocerlos a ustedes, de solidaridades, de afectos, de construcción a partir de la barbarie, de estar hoy precisamente aquí, en un acto independiente en ésta nuestra plaza junto a ustedes, a los que queremos mencionar y agradecer.
Han pasado diez años y la vida continuó. Mirando hacia atrás es difícil reconocernos en aquellos que fuimos hace diez años. Aprendimos a convivir con un profundo dolor, con la melancolía de lo que no pudo ser, con la tristeza de todo lo que ya no será posible. Pero lo más desgarrador es saber todo lo que nuestros muertos se perdieron: la vida que hubieran tenido, el ver crecer a sus hijos y envejecer a sus padres, la posibilidad de realizar sus propios sueños.
Ellos ya no están entre nosotros. Viviremos sin su presencia, sólo con su recuerdo.
Han pasado diez años y superamos temores, fuimos de frente, denunciando tanta mentira y a cada uno de los responsables y los cómplices, y hoy vemos como uno a uno van cayendo como fichas de dominó.
Ojala no sea una utopía pensar que otro tipo de país es posible. Es por lo que nos toca seguir luchando.
Nos queda a todos nosotros, y fundamentalmente al Estado escribir la historia de nuestros próximos 10 años, que deben ser con verdad y en Justicia..
¡!! Nuestros muertos, nuestros hijos y nosotros lo merecemos ¡!
lunes, 11 de febrero de 2008
A 10 años del atentado de AMIA y DAIA.
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